Naturaleza y vida salvaje en estado puro
No hay ningún otro lugar sobre en el planea comparable al delta del Okavango para disfrutar de la fauna salvaje. Los grandes felinos y los elefantes campan a sus anchas en una de las últimas grandes reservas naturales. El delta es sinónimo de abundancia, además de un lugar de incomparable y singular belleza, donde las posibilidades para safaris parecen infinitas, al igual que sus aguas.
Su contrapunto es el magnífico desierto del Kalahari, la mayor extensión árida del planeta, con sus salares, baobabs, valles fluviales fosilizados y maravillosa vida salvaje hacen de Botswana un destino de primer orden.
Lo mejor, que Botsuana ha renunciado al turismo de masas para ofrecer experiencias exclusivas para admirar en primera fila y sin aglomeraciones los fabulosos espectáculos protagonizados por la fauna.
¿Sientes la llamada de la naturaleza?